Background Image
Previous Page  437 / 510 Next Page
Basic version Information
Show Menu
Previous Page 437 / 510 Next Page
Page Background

Cuidados

Continuos

436

Decir o no decir la verdad:

La verdad es un proceso y no un conjunto de hechos que nunca cambian. Informar de la

enfermedad en todos sus apartados no es contrario a mantener la esperanza y va a favor del

respeto al principio ético de autonomía del enfermo. Esto nos permitirá mejorar la participación y

satisfacción del paciente, disminuir el estrés del enfermo mejorando su calidad de vida, reforzar

la confianza mutua, seguridad y el acceso a la información que el enfermo necesita, para ser

ayudado y ayudarse a sí mismo.

Conspiración de silencio:

En nuestro entorno cultural todavía es frecuente ocultar el diagnóstico o pronóstico al paciente

de una enfermedad oncológica. La familia supone que el paciente ignora que su enfermedad es

incurable y de mal pronóstico, y pretende evitar que se entere de ello. A veces los profesionales

sanitarios, conniventes con la persuasión familiar, ocultan el diagnóstico o pronóstico al paciente,

creándose la situación conocida como conspiración de silencio.

La familia pretende autoprotegerse a ella misma ya que también tienen sus miedos, sus temores

y sus dificultades para mantener una comunicación sobre este tema con el paciente.

Igualmente la familia quiere proteger al paciente, pero es un falso proteccionismo ya que se le niega

al paciente la posibilidad de hablar y expresar sus sentimientos con respecto a su situación para

evitarle sufrimientos o por el temor a su reacción al conocer la verdad: deprimirse, suicidarse, etc.

Cierto grado de abatimiento es normal después de comunicar a un enfermo un diagnóstico y

pronóstico relacionado con el cáncer. Tenemos que estar atentos para comprobar si la situación

desemboca en una auténtica depresión, que requerirá tratamiento oportuno.

El suicidio es muy raro dentro del grupo de población oncológica

8

y cuando ocurre suele existir

patología psiquiátrica preexistente al diagnóstico de cáncer. Sin embargo, las ideas repetidas

por el paciente, en este sentido, deben ser tomadas en cuenta y consultar con el psiquiatra de

manera urgente.

Comunicación de malas noticias:

Por “

Malas Noticias

” entendemos aquellas que modifican radical y negativamente la idea

que el enfermo se hace de su porvenir. Hay que informar tales noticias desde una actitud

de acompañamiento y ayuda al paciente y su familia. Una mala noticia puede definirse como

“cualquier información que afecte de manera adversa y seria a la visión individual de futuro de una

persona”

9

.

Todo el equipo médico debería conocer el grado de información que tiene el enfermo y su familia,

además de adquirir habilidades específicas para comunicar “Malas Noticias”.

Se recomienda el uso de una sistemática que no deje cabos sueltos en el proceso, en aras de

conseguir que el impacto emocional para el paciente sea el menor posible. Se trata de amortiguar

su impacto emocional. Nuestro objetivo principal, si queremos dar una mala noticia de una forma

adecuada, es

proveer información realista con el menor daño posible

, facilitando el proceso de

adaptación a la nueva situación planteada al paciente y su familia.