Cuidados
Continuos
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- Los pacientes con antecedentes de infección por hepatitis B, tienen riesgo de sufrir una reactivación;
por ello, la profilaxis debe ser considerada en los de alto riesgo y esta debe comenzarse una
semana antes del tratamiento y continuarse hasta 6 meses después de finalizar el mismo.
OTRAS MEDIDAS PREVENTIVAS
Ambientes protegidos
Las habitaciones con flujo laminar pretenden conseguir un ambiente libre de gérmenes; sin
embargo, no son necesarias medidas tan rigurosas, salvo en pacientes sometidos a trasplante
alogénico de médula ósea. Debido al coste que suponen estas medidas, y no habiéndose
demostrado que afecten de manera importante a la mortalidad, no se utilizan de forma rutinaria.
En algunos centros se utiliza un sistema de aislamiento invertido pero su validez es dudosa, ya
que la mayor parte de las infecciones de estos pacientes se deben a patógenos que colonizan la
propia piel y el intestino.
FACTORES ESTIMULANTES DE COLONIAS GRANULOCÍTICAS.
En los pacientes con neutropenia febril, los factores estimulantes de colonias reducen la
duración de la neutropenia, sin que hayan demostrado un beneficio en la supervivencia. Las
recomendaciones actuales para el uso de CSF se resume en los siguientes puntos:
PROFILAXIS
Primaria
Se refiere al inicio de tratamiento con factores estimulantes de colonias durante el primer ciclo
de quimioterapia mielosupresora con el fin de prevenir las complicaciones por neutropenia
en los sucesivos ciclos. Se recomienda cuando el riesgo de neutropenia febril con el esquema
de quimioterapia es del 20% o mayor
24
. Múltiples estudios randomizados
25,26
coinciden en el
beneficio de la profilaxis primaria en estos casos debido a la reducción de la frecuencia de
hospitalización por infecciones y episodios de neutropenia febril, siendo menos claro su impacto
en la supervivencia durante el episodio y a largo plazo
27
.
Secundaria
Un episodio previo de neutropenia febril, incrementa el riesgo desarrollar un nuevo episodio en
los sucesivos ciclos en un 50%. La administración de CSF disminuye aproximadamente a la mitad
este riesgo; sin embargo, la disminución de la dosis del esquema de quimioterapia sigue siendo
actualmente la opción mas recomendada por ASCO y EORTC, excepto en aquellos casos con
complicaciones durante el episodio de neutropenia febril o en los que la reducción de la densidad
de dosis pueda comprometer el tratamiento.
TRATAMIENTO
Pacientes neutropénicos sin fiebre
No se ha demostrado beneficio clínico con la administración de CSF en pacientes neutropénicos que
permanecen afebriles, por lo que en estos casos no debería ser utilizado de rutina.