Introducción

La hormonoterapia ha sido y es en la actualidad, una de las estrategias de tratamiento más importantes en algunos de los tumores más frecuentes en el hombre y en la mujer. 

Se estima que en Europa y Estados Unidos realizan esta modalidad terapéutica, en algún momento de su evolución, algo más de dos terceras partes de los tumores de mama y casi la totalidad de los carcinomas de próstata y en otros tumores como los de utero y los neuroendocrinos.

Para entender mejor, en qué es y en que consiste la hormonoterapia puede ser de utilidad, antes de profundizar en el tema, desarrollar tres conceptos considerados importantes:

a.- Hormonas: Estas son sustancias (fundamentalmente proteínas) sintetizadas en unos determinados órganos o tejidos y que tienen la capacidad de actuar modificando la función y/o el tamaño de otros órganos y tejidos.

Así por ejemplo, sabemos de la capacidad de los ovarios para producir de forma cíclica estrógenos y como estos tienen la capacidad de modificar la función y el tamaño del útero y de las mamas.

b.- Hormonodependencia es la característica que tienen algunos tejidos, órganos y algunos tumores por la cual necesitan, de determinadas hormonas para el su correcto funcionamiento.

En ausencia de estas hormonas estos tejidos se atrofian y dejan de funcionar. Por ejemplo en ausencia de tetosterona la glándula prostática se atrofia

c.- Receptor Hormonal: Suele ser una proteína más o menos compleja, a través de cual los tejidos y sus células reciben la señal de la presencia de las hormonas (Figura 1).

Habitualmente, aunque no siempre, la presencia de receptores hormonales implica la existencia de una hormonodependencia por el contrario la ausencia de este tipo de receptores implica la una capacidad para desarrollar su funcion o crecer con independencia de los niveles de hormonas.